La preocupación de Cinthia Fernández por la escuela de sus hijas: “¿Cuál es el problema que no les calientan la comida?”

Cinthia Fernández hace unos días que venía muy tranquila con ningún con ningún tema para sobresalir en los medios, que hable de ella misma, claro. Así que está vez la filosa panelista de LAM, conocida en televisión e incluso en su vida privada por generar situaciones incómodas, destapó la olla. Esta vez metió una nueva polémica en su vida personal en relación a la escuela a donde asisten sus hijas.

La modelo y bailarina se descargó e hizo catarsis en sus historias de Instagram, cual influencer. Cinthia Fernández como típica mamá joven, le molestan un montón de cosas de la vida escolar de sus pequeñas. Dedicó un montón de videos a criticar al colegio al que asisten sus hijas y por si fuera poco lanzó una encuesta para que sus seguidores expresen si la bancan o no en sus dichos. Lo que para algunas mamás no es tan importante para ella sí.

El reproche al colegio

A la panelista le molesta el régimen de medidas protocolares de la institución educativa de Bella, Charis y Francesca. Todo comenzó con la palabra tupper y el tema de que las maestras no dejan que los chicos puedan calentar su comida. “Hay un tema que me tiene de muy mal humor también. ¿Cuál es el problema de los colegios que no calientan la comida? ¿Con qué argumento sostenés que el Covid se transmite en un tupper?, comenzó.

Se mostró indignada manifestando que sus medidas no tienen justificación: “Es una cuestión toda gremial, comodidad, no sé qué es”. También aprovechó para pegarle al gobierno: “Ellos te hicieron fiesta en Olivos, ya hay boliches, ya hay de todo, marchas y no te pueden meter un tupper a calentar… meter un tupper chicos, se ponen guantes. A parte ya está comprobado que no se transmite por superficies”, insistió en relación al covid.

Cinthia Fernández le dio con todo su arsenal al colegio y resaltó de que sus hijas no pueden comer comida sana y lo único que comen son galletitas. Y siguió hasta con el bar del colegio: “A parte con qué criterio abrís el bar del colegio, si manejás plata, comida, le entregás pero no podes calentar el tupper. No se sostiene, no hay argumento, me enferman esas cosas. Están horas y horas sin comer”, se quejó.